El artículo cuyo título es “La literatura infantil en la escuela” escrito por Juan Cervera habla de la
presencia de la literatura en las escuelas. De como ha ido variando a lo largo
de los años aunque, sigue sin haber una orientación clara por parte de las
autoridades pertinentes y consensuadas con los maestros, que en definitiva, son
los profesionales que luego tendrán que llevarla a cabo.
Con el avance de los años se ha observado que los
libros, presentes en las bibliotecas de aula, están divididos en varios bloques;
uno destinado a conseguir objetivos cognoscitivos, otro hacia las lecturas
ejemplares y un último destinado a los objetivos psico-afectivos, con lo que
queda patente que el didactismo sigue presente. En lo que atañe al ejercicio
lingüístico ha cambiado en cuanto a la calidad literaria pero sigue sin cubrir
las necesidades de los niños con lo que sigue apoyándose la idea que la
literatura sirve de pretexto para alcanzar otros objetivos.
Uno de los problemas es determinar a qué llamamos
literatura infantil ya que existe una literatura para adultos pero de la que se
ha apropiado el niño como elemento
cultural del mundo adulto, con lo que se asocia el ámbito educativo de la E.G.B. a la literatura infantil.
Diferentes autores defienden que para las primeras etapas educativas está
destinada la literatura infantil ya que, lo que trata, es servir los intereses más profundos de los niños y sobre estos
realizar la selección de los libros, incluidas las fábulas que, aunque arrinconadas
por su valor aleccionador algunas editoriales vuelven a introducirlas en los
manuales de E.G.B. Esto tiene una parte positiva ya que los autores se
especializan en un público determinado, con lo que la literatura será un reflejo
del uso de la lengua convirtiéndose en un
arte. El niño participa del acto
de lectura apropiándose de los textos sin necesidad de que el maestro los
explique.
Cielo González.
Cielo González.
No hay comentarios:
Publicar un comentario